El caballito de mar pigmeo es una de las especies que han sido identificadas más recientemente. Como es tan pequeño, puede mezclarse muy bien con el entorno. No se supo de su existencia hasta que accidentalmente algunos individuos quedaron cautivos en algún arrecife de coral, siendo detectados y examinados de cerca.
Descripción del caballito de mar pigmeo
El tamaño de esta especie es de ¾ de pulgada aproximadamente, se trata de una de las especies de caballitos de mar de menor tamaño. Generalmente son de color amarillo o naranja. Se conoce que en algunos lugares pueden tener un color gris, pero esto depende del color que predomine en su entorno pues sus cuerpos cambian de color con el objetivo de permanecer invisibles. Además tienen un hocico muy delgado en comparación con el de muchas otras especies.
Distribución del caballito de mar pigmeo
Esta especie habita en zonas del Pacífico Occidental, puede ser encontrado en aguas poco profundas y cálidas desde el sur de Japón hasta el norte de Australia.
Comportamiento del caballito de mar pigmeo
Debido al tamaño tan pequeño que tienen, a estos caballitos de mar se les hace difícil la supervivencia. Para lograrlo utilizan como técnica adherirse a los corales gorgonias. Una vez que se encuentren allí, adoptan la misma coloración de estos corales para mezclarse con el entorno. De esta forma son capaces de sobrevivir ya que no son buenos nadadores y al ser demasiado pequeños, no pueden manejar las fuertes corrientes de agua sin ayuda. Esta es una de los pocos tipos de caballitos de mar que no viven aislados, ellos viven en pequeños grupos que pueden tener un máximo de 20 adultos.
Dieta / Alimentación del caballito de mar pigmeo
Al ser tan pequeños, estos caballitos de mar no pueden comer nada que tenga un tamaño relativamente grande en relación a sus hocicos, tienden a consumir pequeñas partículas presentes en su entorno, principalmente partículas de camarón, aunque consumen otros tipos de crustáceos.
Como el resto de los caballitos de mar, también se alimentan con mucha frecuencia y lentamente pues no tienen sistema digestivo. De hecho, la mayor parte del tiempo la dedican a descansar o comer, actividad que disminuye durante los rituales de apareamiento.
Reproducción del caballito de mar pigmeo
Al llegar el período de apareamiento se crea una atmósfera diferente dentro del grupo donde viven los caballitos de mar pigmeos. Esto puede durar casi todo un año, dependiendo de los niveles de tensión que existan y de la cantidad de comida disponible, pudiendo ocurrir incluso algunos intercambios de pareja.
El cortejo ocurre para permitirles aprender sobre los movimientos de su futura pareja, llegado el momento del apareamiento necesitarán imitarla tanto como sea posible. La proximidad en la que viven estos individuos constituye una ventaja debido a que al estar familiarizados unos con otros, el apareamiento suele ser menos complejo.
Las hembras depositan los huevos en el cuerpo del macho, quien tiene una bolsa que le permite mantenerlos. Pueden depositarse cientos de pequeños huevos y casi siempre transcurren varias semanas para que el macho sea capaz de dar a luz. La temperatura del agua afecta este tiempo, cuanto más caliente esté, más rápido se van a desarrollar las crías, las cuales se clasifican como una de las criaturas más pequeñas al nacer. Sin embargo tienen mayor tasa de supervivencia que la mayoría de las especies de caballitos de mar, lo que se debe a la gran habilidad para esconderse en su entorno natural. Su color les permite combinar más fácil que cualquier otro tipo de caballito de mar en el planeta, afortunadamente para ellos, cuentan con esta característica ya que tienen que cuidar de sí mismos inmediatamente después del nacimiento, no tendrán el cuidado de sus padres en absoluto.